El portugués Renato Paiva llegó a León para tomar las riendas de la Fiera, decidido a instalarse por un buen tiempo, por lo que aterrizó incluso en compañía de sus gatos.
Una vez desligado del Independiente del Valle, al que deja como entre los punteros en Ecuador, cuya liga se juega de febrero a noviembre, el luso que comenzó a tener éxito como visor para las fuerzas básicas del Benfica, apareció en el aeropuerto del Bajío ya enfundado en una sudadera esmeralda con el escudo del club guanajuatense.
“Estoy orgulloso, feliz, muy contento, ansioso por empezar”, expresó en una breve manifestación de intenciones.
“Vamos a dar todo por este club y venimos para ganar. (El objetivo es) ganar, ganar, mejorar el equipo, a los jugadores y ganar”.
BEM-VINDO RENATO PAIVA 🇵🇹
— Club León 🇲🇽 (@clubleonfc) May 31, 2022
Afición, cuerpo técnico y equipo, juntos haremos del León una #FieraIndomable 🦁.
Comienza una nueva etapa en nuestra Institución… pic.twitter.com/XfvPpY0L6p
Paiva avisó desde el viernes pasado en Ecuador que emigraría a la Liga MX porque le sedujo mucho la fuerza con la que el León lo buscó, sobre todo porque recibió una oferta de la Fiera desde diciembre pasado.
Paiva llega para tomar las riendas del León luego de que Ariel Holan dejó al equipo en la Jornada 15, cuando Christian Martínez quedó como entrenador interino, sin que el equipo pudiera alcanzar el Repechaje, pues terminó en la posición 13.
Según mencionó el León en sus redes sociales, Paiva llegó acompañado de Happy y Blue, su par de gatos que tenía desde Ecuador, de donde viajó a la Ciudad de México, para conectar con otro vuelo esta mañana con dirección a León.
“Son normales, no tienen una raza específica. Son encantadoras, muy cariñosas las dos y están como yo: muertas, están peor porque aún no han salido de aquí. No dormimos, salimos a la 1 de la mañana”, agregó Paiva.
El entrenador será presentado de manera oficial este miércoles durante una conferencia de prensa, luego de que el plantel de jugadores inició la pretemporada desde hace un par de viernes, cuando iniciaron los trabajos con un preparador físico que ya era parte del cuerpo técnico de Paiva.