Duro golpe a la liga estadounidense de futbol tras revelarse una investigaciones de supuestos abusos sexuales y verbales.
En un reporte divulgado por el bufete independiente de abogados, King & Spalding, se revelaron supuestos casos de violencia verbal y emocional hacia las deportistas; así como comportamientos sexuales inapropiados desde las categorías superiores hasta las inferiores.
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De acuerdo con la investigación, se entrevistaron cerca de 200 jugadoras retiradas y en activo, entrenadores, dueños, directivos y personal de staff; donde arrojó evidencias de tácticas manipuladoras y de abuso de poder para mejorar en el juego.
Sin embargo, la preocupación llegó al quedar al descubierto patrones de comentarios sexuales, tocamientos indeseados y relaciones coercitivas.
“Los equipos, la liga y la federación de Estados Unidos no sólo fracasaron sistemáticamente a la hora de responder de formar adecuada cuando fueron confrontados con denuncias de jugadoras y muestras de abuso, si no también a la hora de instaurar medidas para prevenirlo y afrontarlo”, destacó King & Spalding en un documento que difundió de 36 páginas.
National Women's Soccer League Releases Statement in Response to the Sally Q. Yates Report Commissioned by U.S. Soccer.
— National Women’s Soccer League (@NWSL) October 3, 2022
Este error de vigilancia conllevó a que los supuestos culpables de estos abusos se fueran moviendo de equipo en equipo sin que nadie los pudiera frenar y siguieran contratándose sin problema en cualquier club.
Este escándalo no sólo se le adjudica la culpa a la NWSL, que fue creada en 2012, puesto que el despacho de abogados aseguró que estas conductas ya eran un problema desde antes de su fundación, cuando se disputaba la WPS.
King & Spalding reveló los nombres los que se centra el reporte, y que son tres entrenadores: Paul Riley, Rory Dames y Christy Holly; sin embargo, sólo serían pocos de los que estarían inmiscuidos, recordando que la temporada pasada la mitad de los equipos separaron de sus cargos a sus técnicos por denuncias de jugadoras.
Uno de esos casos fue con Dames, cuando las futbolistas del juvenil del Eclipse Select Soccer Club lo acusaron de llamarles ‘putas’, ‘retrasadas’ o ‘trasero gordo’; y que en múltiples ocasiones llegó a cruzar el límite de las relaciones sexuales.
Para finalizar, la investigación sostiene que en general los clubes, la NWSL y la USSF (por encima de la seguridad y el bienestar de las jugadoras), decidieron callar para no generar grandes consecuencias legales y a la mala prensa que eso podría haber atraído.
Como conclusión, la recomendación que realizó el bufete de abogados fue tener una mayor transparencia, rendición de cuentas y un reglamento más duro por comportamientos inapropiados.