Achraf Hakimi y Marruecos son una de las grandes sorpresas en lo que va la Copa del Mundo en Qatar al terminar en primer lugar de su sector.
Ahora, tendrán que enfrentar a España en los octavos de final, y aunque no parten como favoritos, buscarán dar la campanada y meterse a los cuartos de final.
El lateral marroquí del Paris Saint Germain se sinceró y platicó sobre algunos temas con ‘Marca’, de cara al partido.
Orgulloso de representar a Marruecos
“Es algo único, jugar para tu país. Y sobre todo ahora que estamos haciendo historia. Es increíble ver cómo lo está viviendo la gente, eso nos transmite bastante y nos da fuerza para continuar y hacer grandes cosas. Son momentos que nunca vas a olvidar, más aún cuando marcas la historia”.
Cambiar la mentalidad del ‘mundo árabe’
“Son diferentes grupos. Esta es una generación joven, que tiene hambre, que quiere cambiar cosas; queremos hacer historia, que es lo que estamos consiguiendo, y cambiar la mentalidad sobre el mundo árabe, decir que, por qué no, los equipos árabes pueden hacer grandes cosas en Europa. Lo estamos haciendo, sobre todo en el Mundial”.
Diferente rol en la Selección que en PSG
“Son diferentes. En París hay grandísimos jugadores, como aquí, pero con Marruecos tengo más importancia en el juego, toco más la pelota, me dan la importancia de sentirme a gusto. En el París es muy diferente: a veces corres y no recibes la pelota; aquí me intentan buscar, saben la importancia que puedo tener ofensiva y defensivamente. Me dan mucha confianza y la intento devolver”.
Merecen respeto
“Hacemos nuestro trabajo, hemos sido primeros de grupo y yo creo que ya nos merecemos un poco de respeto. Creo que España sabe eso y que nos tiene que tener un poco de miedo. Nos tienen que tener miedo, la verdad. Y por qué no dar la sorpresa otra vez”.
Posibilidad de representar a España
“Sí, hubo momentos en Juvenil. Hubo contactos, fui a la Selección Española también para probar, con De la Fuente. Estuve un par de días en Las Rozas y vi que no era mi sitio adecuado, no me sentía como en casa. No era por nada en concreto, sino por lo que yo sentía, porque no era lo que había mamado y vivido en casa, que es la cultura árabe, ser marroquí. Yo quería estar aquí”.
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