En Qatar tienen claro que la Selección de Brasil pagó caro el haberle faltado al respeto a uno de los animales más venerados por el islam.
El pasado jueves, Vinicius Rodrigues, jefe de prensa de la Selección de Brasil, causó indignación luego de quitar y aventar de forma brusca a un gato que descansaba en la misma mesa donde el volante Vinicius Jr se disponía a dar una conferencia de prensa previo al duelo ante Croacia por Cuartos de Final.
La imagen causó revuelo a nivel mundial, pero generó un malestar particular entre los qataríes y otros aficionados al futbol que practican la religión del Islam, pues dentro de esta el gato es considerado como uno de los animales más apreciados por su lazo con el profeta Mahoma.
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Es por ello que, tras ver la acción de Rodrigues con el minino, muchos creyeron que la Canarinha había firmado su eliminación del Mundial de forma prematura e incluso antes de jugar, pese a que más de uno le veía como favorita al título.
Y se cumplió, poco más de 24 horas después del incidente con el gato, Brasil cayó rendido ante Croacia en el Estadio Ciudad de la Educación y en tanda de penales.
“Eso les pasa por maltratar al gatito. Por eso a los animales hay que acariciarlos y ver si necesitan algo. Bien merecido se lo tiene Brasil”, mencionaron seguidores.
“Y para el folclor me gustaría creer que a Brasil lo eliminó esa maldición del gato. Por eso si yo me encuentro a un gato, le compro comida y hasta me lo llevo a Argentina”, dijo un aficionado entre risas.
Tras el gesto de Vinicius Rodrigues con el gato, aficionados qataríes y hasta brasileños se quedaron a la espera de un pronunciamiento o disculpa pública de la Selección de Brasil, pero esta nunca llegó.
24 horas más tarde, la maldición del gato hizo efecto y se cargó a Brasil de un Mundial que hasta hoy era favorito para ganar.