La obtención de la Copa del Mundo de Qatar 2022 significó una tremenda alegría para el pueblo de Argentina, aunque los festejos quedaron empañados tras confirmarse la muerte de un aficionado de 24 años, esto luego de sufrir un traumatismo craneoencefálico por una caída; el hombre estaba internado en el Hospital Fernández, donde reportes indican que agonizó por más de un día.
De acuerdo al portal Infobae, A.M. como fue identificado el afectado, un reporte indicó que fue encontrado por un oficial de policía de la Comisaría 1A en la zona de Recova, en Buenos Aires. “Se encontraba saltando en el techo, festejando el triunfo de la Selección, hasta que una chapa se rompió y cayó al piso”, y ahí perdió el conocimiento, añadieron.
¡NO PUDIERON CONTENER LA RISA!🤣#FOXSportsEnQatar | Aficionado le lanzó una tortuga de peluche a Lionel Messi en alusión a Kylian Mbappé 🐢
— FOX Sports MX (@FOXSportsMX) December 20, 2022
VIDEO📹https://t.co/VmMo6TLYIl
Por su parte, la familia de A.M. negó dicha versión, pues aseguraron que en ningún momento estaba saltando sobre la estructura, “por desgracia pisa en una chapa (lámina) la cual no tenia ningún tipo de soporte y cayó al vacío”, señalaron.
Entérate: ¡Guillermo Ochoa no seguirá en América! Vuelve a Europa y jugará en la Serie A
Al lugar arribó una ambulancia para trasladarlo de urgencia al centro médico, sin embargo ya poco se pudo hacer, pues poco después se le diagnosticó muerte cerebral.
Locura en Argentina por su selección
Desde el domingo 18 de diciembre, fecha en que Argentina venció en penales a Francia para agenciarse el título en el Mundial de Qatar 2022, algo que no conseguían desde que Diego Maradona se consagró con la Albiceleste en México 1986, cientos de miles de personas se arremolinaron a las calles para celebrar.
Se estima que ese día salieron entre uno y dos millones de personas, mientras que este martes 20, en el desfile de los seleccionados encabezados por Lionel Messi se registró una afluencia de entre cuatro y cinco millones, colapsando las principales avenidas de Buenos Aires.
Fue tanta la aglomeración de aficionados que impidieron que el autobús que trasladó al conjunto dirigido por Lionel Scaloni que no pudo acercarse siquiera al Obelisco, monumento característico donde los seguidores argentinos suelen celebrar éxitos deportivos.