Pelé fue expulsado en Colombia, pero volvió a la cancha a jugar ¿por qué?

El encuentro terminó con un árbitro expulsado y una denuncia penal

Pelé jugó en varias ocasiones en territorio colombiano con Brasil, pero el partido más recordado será el de 1968 en el que viajó junto al Santos de Brasil para medirse en un compromiso amistoso contra la selección de aquel país.

Aquel año, Colombia logró su boleto para los Juegos Olímpicos que se iban a realizar en México y no solo eso, la federación de aquella nación también pudo gestionar un partido amistoso contra Santos de Brasil que incluía a la estrella Pelé.

El estadio que albergaría el evento sería ‘El Campín’ situado en Bogotá, Colombia. Los directivos asignaron a Guillermo Velásquez como el árbitro del partido. El colegiado era reconocido por su buen hacer al homologar un compromiso, pero también por la facilidad en la que perdía los estribos y se iba a los puños contra los futbolistas.

El partido

Con un estadio lleno para ver a ‘O Rei’, el partido vio su primera anotación a los tres minutos de haber iniciado, el autor fue el colombiano Alfredo Arango. Los jugadores de Santos reclamaron que el abanderado marcó fuera de juego, pero el árbitro central dio por buena la anotación, lo que derivó en que el capitán del conjunto brasileño pateara a Velásquez. De algún modo se calmaron los ánimos y el partido reinició.

Cerca del final de la primera parte, Pelé falló un remate, en el cual alegó una falta del rival. El silbante no la marcó y Pelé le pronunció todas las groserías posibles. Velásquez que ya había estado en Brasil y conocía los improperios de aquel país, entendió cada palabra que le dedicó el astro brasileño. Sin embargo, en aquel entonces las tarjetas rojas no existían, así que solo expulsó a Pelé de palabra. Ese fue el momento en el que el compromiso se salió de las manos; la gente fúrica reclamó el regreso de Pelé a la cancha, los jugadores se le fueron a los golpes al árbitro y los directivos expulsaron a Velásquez para que no homologara más el cotejo, un elemento de la federación bajó para tomar el rol del abanderado, ya que el juez de línea pasó a ser el silbante central.

Todo para que Pelé volviera al terreno de juego.

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El partido terminó en una denuncia penal

El altercado entre Velásquez y la comitiva de Santos de Brasil no pasó desapercibida. Tras ser removido del partido, el colegiado se duchó y asistió a la comisaría más cercana para levantar una denuncia.

“De una delegación de 28 personas, los únicos que no me pegaron fueron el médico, el periodista y Pelé”, reveló Velásquez a un medio local.

La delegación de Santos tuvo que quedarse dos días más en Colombia por la denuncia, misma que se solucionó fuera de los juzgados con una suma de dinero para Velásquez.

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