Con una cancha que ‘sale’ a tomar el Sol: La maravilla del State Farm Stadium, sede del Super Bowl

La casa de Arizona Cardinals vivirá su tercer gran partido de la NFL, recordando que fue el escenario que presenció la dolorosa derrota de los invictos New England Patriots (16-0) ante New York Giants en la edición XLII con aquella recepción tan recordada con la ayuda del casco de David Tyree.

Aunque en el Super Bowl XLIX, Tom Brady logró sanar la herida y se cobró revancha con la intercepción en el ocaso de Malcolm Butler para que Patriots derrotara a Seattle Seahawks en el entonces llamado University of Phoenix Stadium.

Tuvieron que pasar 8 años para que el estadio ubicado en Glendale volviera a ser sede de un Super Bowl, donde ahora nos depara una gran cita entre Kansas City Chiefs y Philadelphia Eagles.

A pesar de tener una historia de más de década y media, el State Farm Stadium aún es considerado una de las maravillas modernas en la construcción, donde su principal atractivo es su cancha retráctil.

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Con la intención de usar pasto natural, y éste no se dañe con otros espectáculos en el recinto, los ingenieros diseñaron un sistema para sacar el campo a una de las cabeceras para que ‘tome el Sol’.

Apoyado en una base de un metro de altura y 546 ruedas, el terreno de juego se puede desplazar a las afueras del State Farm Stadium en aproximadamente 70 minutos.

Eso sí, para que no le afecten los contrastantes cambios de temperatura del desierto, calor en verano y heladas en el invierno, el campo se resguarda en las noches donde recibe un tratamiento especial.

Techo retráctil

Otra de las bellezas del inmueble es su domo traslúcido y retráctil, lo que permite jugar a campo abierto o cerrado, en caso de alguna lluvia.

Con un sistema de 480 caballos de fuerza, los ingenieros diseñaron la manera de mover los dos niveles de paneles del techo que están inclinados, los cuales son apoyados por ocho cables que lo sujetan para no dañar las estructura.

Respecto a la fachada, cuenta con paneles metálicos, los cuales tienen dos funciones principales: disipar el calor del desierto, y la otra, poder proyectar imágenes o luces como si fuera una pantalla gigante.

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Capacidad

El State Farm Stadium no podrá presumir que vivirá su tercer Super Bowl, también ha sido testigo de otros grandes eventos como dos campeonatos de la NCAA y recibir el Final Four de baloncesto colegial en 2017.

Su versatilidad para modificarlo es tan grande, que no solo es la casa de Arizona Cardinals o del Fiesta Bowl, también es usado para tener convenciones, shows de motocicletas, fútbol o conciertos, donde pueden albergar a 63,400 espectadores sentados, pero con la posibilidad de ampliarlo a 73,000 para magnos eventos.

Entre ello también puede presumir tener 88 palcos, y 7,505 asientos VIP.

Todo listo para que el State Farm Stadium reciba su tercer Super Bowl, cuando Chiefs y Eagles se vean las caras el domingo 12 de febrero, transmisión que podrás disfrutar en FOX Sports.

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