De mezclar agua con leche por la pobreza, a la final de Champions: la historia de Romelu Lukaku

Lukaku relata cuál fue el factor determinante que lo catapultó al futbol profesional

Romelu Lukaku pasó de mezclar el agua con leche a ser finalista de la Champions League y el delantero del Inter hizo un repaso de lo dura que ha sido su vida antes de llegar al futbol profesional.

“Mi mamá pedía prestado pan”

Romelu Lukaku relata qué fue lo que detonó su deseo para ser futbolista y no fue otro que la situación económica de su familia, debido a que no tenían electricidad de dos a tres veces por semana y tenía que bañarse calentando agua en la estufa, no podía ver los partidos de la Champions League y su madre a veces tenía que pedir prestado en la panadería el lunes y pagarlo el viernes.

Todas esas carencias en Bélgica detonaron al delantero a querer ser futbolista.

“Sabía que teníamos problemas, pero cuando mi mamá estaba mezclando el agua con la leche, me di cuenta que era el final ¿sabes a lo que me refiero? Esa era nuestra vida”, comentó en The Players’ Tribune.

“No pronuncié ni una sola palabra, no quería que se preocupara. Solo comí mi merienda, pero ese día me prometí y también a Dios, porque sabía exactamente qué tenía que hacer”.

Lukaku relata que le preguntó a su papá “¿A qué edad puedes empezar a jugar futbol de manera profesional?” y su padre le respondió que a los 16, así que se puso como objetivo tener un contrato profesional a esa edad.

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Discriminado a los 12 años

Una vez que logró entrar a las inferiores del Lièrse tuvo un conflicto en un partido de visita. Un padre de familia del equipo rival pidió su identificación, ya que Lukaku era más alto y fuerte que el resto de los niños de su edad y solo presenció como los padres de familia examinaban uno a uno su credencial.

“Voy a acabar con tu hijo. Ya lo iba a acabar, pero ahora voy a destruirlo. Lo vas a tener que llevar a casa llorando”, pensó Lukaku cuando todo eso sucedió.

Aquella temporada marcó 76 goles en 34 partidos y los grandes equipos ya tenían en la mira al delantero.

La mala noticia es que su abuelo falleció cinco días después de que Lukaku le contó sobre su hazaña y le hizo prometer que cuidaría de su madre.

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Cumplió su promesa

A los 16 años ya estaba en el equipo Sub-19 del Anderlecht. Sin embargo, era un jugador con pocos minutos y optó por apostar con su entrenador a que iba a marcar 25 goles antes de diciembre y si no lo hacía volvería a la banca.

A cambio, Lukaku solicitó al técnico lavar el camión del equipo y llevar pancakes a los jugadores todos los días del resto de la temporada, el resultado...

Esa fue la apuesta más tonta que pudo haber hecho ese hombre. Para noviembre, ya había marcado 25 goles y comíamos pancakes antes de Navidad. Nunca debes apostar contra un niño que está hambriento”, relató Lukaku.

Con 16 años y 11 días firmó su primer contrato profesional, lo primero que hizo fue comprarse el videojuego de FIFA y contratar un servicio de TV de cable.

Cuando disfrutaba de la televisión recibió una llamada e iba a jugar la final del playoff del Anderlecht contra el Standard Liege.

Ese día perdieron, él entró al minuto 63′, pero cumplió su promesa y sabía que su mamá iba a estar bien.

Él deseaba poder volver hablar con su abuelo y decirle...

“¿Ves? Te lo dije. Tu hija está bien. No hay más ratas en el departamento, no duerme más en el piso, no hay más preocupaciones. Ahora estamos bien”, anheló expresar eso.

Romelu Lukaku ya pasó por los grandes equipos de Bélgica, Inglaterra y ahora con el Inter de Milán tiene la posibilidad de ganar la UEFA Champions League y todo porque un día vio a su madre mezclar agua con leche.

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