‘Se acalambró por esfuerzo, necesitamos jugadores así’: compañeros ALABAN a Edson Álvarez en West Ham

El mexicano no deja de recibir elogios tras sus dos primeros con el West Ham

Dos partidos le bastaron a Edson Álvarez para ganarse el cariño de la afición y el respeto de sus compañeros en el West Ham.

Y es que el mediocampista mexicano le cayó como anillo al dedo al conjunto londinense, que estaba necesitado de mucho apoyo para suplir la baja del todoterreno Declan Rice, quien se marchó al Arsenal por una cifra récord para un futbolista británico.

Edson, quien le costó 35 millones de libras al West Ham, ha sido toda una revelación para aficionados y jugadores de los Hammers gracias a la garra y corazón que le pone a los partidos, convirtiéndose en una auténtica aspiradora en el mediocampo de su equipo.

Así lo demostró en su debut con el Chelsea, y además en su primer partido de titular, cuando enfrentó al peligrosísimo Brighton, que es el equipo revelación de la Premier League.

De esto se dio cuenta el volante inglés Jarrod Bowen, uno de los jugadores más respetados en el club y compañero de Álvarez.

“Creo que viste a Eddy (Edson) al final con calambres porque dejó todo ahí afuera. Necesitamos jugadores así, es un jugador adecuado para el West Ham”, dijo Bowen al finalizar el duelo ante Brighton.

Ese encuentro marcó la primera titularidad de Edson con los Hammers, que marchan en el segundo lugar de la clasificación.

¡SE MANDÓ JUGADÓN DE FANTASÍA!

En su primer juego de titular con el West Ham, Edson Álvarez se echó a la bolsa a la afición de los Hammers.

Y es que el mexicano tuvo un partido por demás brillante con su nuevo equipo en la Premier League, que sorpresivamente goleó 3-1 al Brighton por la Jornada 3 del campeonato local.

Ya en los minutos finales del primer tiempo, Edson apareció sólo en su propia área grande, con la presión de tres jugadores del Brighton, quienes lo fueron a cazar con todo para recuperar la pelota, pues las chances de gol eran grandísimas.

Pero con mucha calma, Edson decidió no despejar el balón y empezó a quitarse uno por uno a los jugadores del Brighton en plena área grande y a centímetros de su propio arco.