Lamentable fin de semana para Red Bull en el Gran Premio de Singapur. Los dos pilotos de la escudería austríaca quedaron eliminados en la Q2 de la clasificación y previo a la qualy, Max Verstappen protagonizó un descontento con su equipo debido al rendimiento de su monoplaza.

Durante la tercera práctica libre en el Circuito de Marina Bay, el neerlandés se mostró molesto y se lo hizo saber al equipo a través de la radiocomunicación. Max Verstappen, quien ha ganado las últimas diez carreras de manera consecutiva, no se ha sentido a gusto con su RB19 y en varias ocasiones reiteró su inconformidad por sus sensaciones con los cambios ascendentes.

El bicampeón del mundo declaró por la radio que la situación era “inaceptable” y después de la tercera sesión de práctica libre advirtió que todavía queda mucho por mejorar.

“Tal vez un poco más suave. Pero estamos a kilómetros todavía. Me genera inestabilidad. No solo al subir, sino también al bajar (los cambios) [...]. Estoy luchando con el agarre trasero. Has visto el último sector, estoy derrapando. Si compito en drifting, podría ganar la carrera ”, sentenció el volante de Red Bull al ser preguntado por su ingeniero de carrera, Gianpiero Lambiase.

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¿Qué es lo que pasa con Red Bull este fin de semana?

Después de lo que pasó con Max Verstappen en Singapur, Bernie Collins, antigua ingeniera y jefa de estrategia de equipos de Fórmula 1, explicó qué es lo que podría hacer Red Bull para mejorar la situación del piloto neerlandés.

“Hay muchos cambios electrónicos que pueden hacer en los cambios, pueden sacarlos de este cambio tan duro. Pero el tema con un cambio duro es que es muy rápido. Así que, en realidad, no pierde mucha velocidad en la recta [...]. Si cambias a un cambio más suave, es más seguro y el coche se sentirá mejor, pero será más lento. Fundamentalmente, el coche será más lento en la recta. Así que eso afecta a la aceleración”, detalló en Sky Sports.