¡La zona de DESCENSO los acecha! Javier Aguirre y Mallorca dejaron ir triunfo ante Valencia

Mallorca se puso arriba con un gol tempranero, pero dejó ir la ventaja

Mallorca y Valencia se van al parón de la Liga sumando un punto en Son Moix (1-1) que no satisface las expectativas con las que ambos equipos habían afrontado un partido que finalizó en tablas con los goles de Dani Rodríguez y Diego López.

Los bermellones se habían exigido dar la primera alegría a su afición con un triunfo, y no lo consiguieron; en las filas valencianistas el objetivo era sumar los tres puntos para romper la racha de tres partidos sin ganar (empate en Almería y derrotas ante la Real Sociedad y Betis).

El punto tiene un sabor amargo para el grupo del mexicano Javier Aguirre, que encadena su tercer empate consecutivo tras las tablas ante el Barça y el Rayo Vallecano.

Al equipo de Rubén Baraja tampoco le basta, pero tiene un colchón de puntos que le permite afrontar el futuro con más tranquilidad.

Con una defensa integrada por cuatro jugadores (González, Nastasic, Valjent, Toni Lato), y no de cinco como era habitual en el sistema de el “Vasco”, el Mallorca afrontó la visita del Valencia.

Abdón Prats y Vedat Muriqi, autores de 8 goles entre ambos esta temporada, formaron la dupla atacante de los bermellones; el kosovar, precisamente, asistió a Dani Rodríguez para que este empalmara un zurdazo imparable en el 1-0.

El Valencia, con Yaremchuk y Hugo Duro en el ataque, y el regreso al once de Selim Amallah y Thierry Rendall, empezó dubitativo, circunstancia que le costó encajar el golazo del centrocampista gallego.

Falló Christian Mosquera en el despeje, prolongó Muriqi un pase de Antonio Sánchez y fusiló Dani Rodríguez.

¡VALENCIA APROVECHÓ FALLAS DEL MALLORCA!

Con la ventaja en el marcador, el Mallorca se echó atrás. Dio todas las facilidades del mundo a su rival para que este tomara el mando de las acciones, y lo pagó caro en el tiempo de descuento con el empate, obra de Diego López, al conectar un cabezazo inapelable.

Los mallorquinistas cedieron el control de las acciones con el objetivo de intentar sentenciar con un contragolpe.

A punto estuvo de conseguirlo con un gol anulado a Muriqi por un claro fuera de juego, aunque antes, Pepelu había estrellado en el palo un lanzamiento de falta directa.

La segunda parte comenzó con un cabezazo envenenado de Muriqi que Giorgi Mamardashvili supo leer a la perfección y continuó con un remate al palo del uruguayo Gío González.