La Final del futbol femenil de los Juegos Panamericanos de Santiago 2023 que resultó en victoria para México sobre Chile, comenzó con un detalle particular en la cancha del Estadio Elías Figueroa, pues las integrantes de La Roja decidieron protestar contra sus dirigentes apenas iniciando el compromiso, imagen que se volvió viral en redes sociales.

Al sonar el silbatazo inicial las 11 jugadoras de Chile decidieron sentarse sobre el césped ante la mirada de sus colegas mexicanas, quienes decidieron respetar la iniciativa, manteniéndose también en sus posiciones, evitando cualquier situación de ataque que hubiera comprometido a sus rivales en la disputa por la presea dorada, a la que las sudamericanas se presentaron en desventaja.

Vale recordar que la escuadra andina no pudo contar con sus porteras, Christiane Endler y Antonia Canales, además de las futbolistas de campo Karen Araya y Camila Sáez, debido a que los directivos chilenos no lograron una prórroga en los permisos otorgados por los clubes de las implicadas, por lo que al culminar la Fecha FIFA debieron reportar sin la posibilidad de quedarse a pelear por el oro.

El comunicado de las jugadoras de Chile

Tras esto, en las redes sociales de las jugadoras apareció un comunicado en el que explicaron su malestar contra los miembros de la Federación Chilena, a quienes acusaron de presionar a la guardameta del Olympique de Lyon para quedarse pese a que la Fecha FIFA había concluido.

“Lamentamos que la Federación no haya respaldado a nuestras compañeras explicando rápidamente los motivos por los cuales debían regresar. Esto las expuso a la desinformación de los medios de comunicación, generando una sensación mediática que dañó la imagen y reputación como futbolistas, cuando siempre han representado a nuestro país con gran compromiso y profesionalismo”, se lee en el escrito.

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Las integrantes del elenco chileno también se quejaron de la logística implementada por la Federación andina, apuntando que no tuvieron la mejor planeación en cuanto a hospedajes y traslados a las sedes de los diferentes partidos que encararon.

“Queremos expresar nuestro profundo malestar por los errores que llevaron a la ausencia de una arquera para disputar un partido tan crucial como la Final del futbol femenino en Santiago 2023. Desde el inicio de la competencia sabíamos que nuestras compañeras debían regresar a sus clubes, y esta posibilidad generó incertidumbre y presión innecesaria en el camino a una Final que lamentablemente se ve empañada”, añadieron.

Fue por esto que Chile debió alienar como guardameta improvisada a la delantera María José Urrutia, quien cumplió con una buena actuación ante el Tricolor, aunque no pudo hacer nada en el golazo de tiro libre que le dio la medalla dorada a México, obra de Rebeca Bernal.