Jugar en México parece ser una “sentencia condenatoria” para ser convocado a la Selección de España. Al menos, eso es lo que con total honestidad piensa Álvaro Fidalgo, mediocampista del América que fue cuestionado sobre si mantiene la esperanza de ser convocado, en algún momento, con La Furia.
Con el boleto a la Eurocopa 2024 como cabeza de serie, España es una de las potencias mundiales, con jugadores repartidos en distintos clubes élite del Viejo Continente. La calidad y cantidad de futbolistas, así como el nivel de competencia en Europa comparado con la Liga MX, hace que Fidalgo no tenga esperanzas de representar a su país en el futuro cercano.
“Hay que ser realista y yo lo soy. Estando en México y con los jugadores que hay en mi posición en la selección española, pues en este momento las posibilidades de un llamado no existen”, dijo el jugador de las Águilas a la agencia noticiosa española EFE en entrevista.
Fidalgo acepta que Betis lo buscó en verano
Consolidado como uno de los mejores futbolistas del América y de toda la Liga MX, el canterano del Real Madrid reveló que hubo acercamientos con el Real Betis en verano, equipo en el que milita el mexicano Andrés Guardado y al que el americanista descartó, pese a que eso le significó prácticamente cerrarse las puertas a cualquier llamado en Selección.
“En verano hubo un acercamiento, pero ya lo dije, mi cabeza está en el América, no pienso en otra cosa. Lo único que está en mi cabeza es la Liguilla que vamos a jugar y en que me quedan tres años de contrato con este equipo, así que no es algo que me planteé”, indicó.
“Por eso estoy centrado en el América, en el inicio de esta Liguilla, en terminar mi contrato con el equipo. Tengo una gran ilusión con levantar el título de liga y todo va por buen camino para hacerlo”.
Por último, Fidalgo aseguró que buscará revancha tras la expulsión en Semifinales del Clausura 2023, partido en el que América fue derrotado por su acérrimo rival, Chivas, justo cuando los azulcremas quedaron en inferioridad numérica.
“La Liguilla pasada me pasó lo peor que podría suceder, pero ahora tuve un gran torneo y más que una revancha aprendí que un error te puede cambiar todo, tal como sucedió con esa expulsión; aprendí a controlar mis emociones, sobre todo en partidos importantes”.