La idílica historia de Jardine y Leal: dos ‘bomberos’ amigos, ahora finalistas

Hace poco más de seis meses, los amigos Andre Jardine y Gustavo Leal delineaban juntos el plan del Atlético San Luis para afrontar el Apertura 2023… hoy están a horas de enfrentarse por el boleto a la Final de este mismo torneo.

Y es que el pasado mes de junio, América, con el agua hasta el cuello, tuvo que romper esa armonía entrenador-auxiliar técnico con tal conseguir un nuevo entrenador luego de que hombres como Javier Aguirre, Diego Alonso o Gregg Berhalter, entre otros, le cerraran la puerta en su intento por traer un técnico de elite, tras la polémica renuncia de Fernando Ortiz, quien firmó con Rayados días después de dejar el cargo.

Ya prácticamente sin opciones de peso en la baraja, América tiró de un as bajo la manga, uno que conocía el futbol mexicano, y que ya estaba haciendo ruido con un San Luis que, después de varios años tras su vuelta a Primera División, finalmente se ganaba poco a poco el respeto y la admiración de propios y extraños.

Así, en un abrir y cerrar de ojos, América le arrebató a San Luis a Andre Jardine, y al quedarse sin su entrenador, la directiva potosina no se rompió la cabeza y tiró de la mano derecha de Jardine para ocupar la vacante. Una carambola que provocó dos bomberazos.

¡DE BRASIL PARA MÉXICO!

La historia entre ambos comenzó en agosto de 2019, cuando Jardine, entonces entrenador de selecciones menores de Brasil, volteó a las fuerzas básicas del Fluminense para scoutear no a uno de sus jugadores, sino para llevarse a su talentosos formadores: Gustavo Leal.

Entrenador y auxiliar técnico, trabajaron a marchas forzadas para conformar a la potente plantilla que habría de competir en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, donde finalmente se llevaron el oro tras tumbar a España en la Final y luego de dejar fuera al Tri de Jaime Lozano en Semifinales.

Ya en 2022, San Luis hizo una apuesta arriesgada con tal de cambiar su inercia negativa en la Liga MX y apostó por Jardine para dirigir su nuevo proyecto deportivo. Pero el nuevo DT no llegó solo, del avión también bajó Gustavo Leal.

El proyecto de Jardine no tardó en dar frutos, San Luis pasó de ser un equipo aburrido y predecible, a impregnarle vértigo a su juego, uno que incomodó mucho a sus rivales. En dos de sus tres torneos con el conjunto potosino, Jardine metió al equipo dos veces a la Liguilla, con Leal como la mente maestra a nivel táctico, según cuenta su gente más cercana.

Fue por eso que, cuando América le ‘robó’ a Jardine a San Luis, la directiva del conjunto rojiblanco apostó todo por Leal quien, a sus 37 años, ya metió al equipo a las Semifinales del futbol mexicano.

Ambos forjados como entrenadores en las fuerzas básicas del talentoso futbol brasileño, Jardine y Leal se verán forzados a dejar su amistad de lado durante 180 minutos, con tal que seguir soñando con ese primer título de Primera División, el que significará finalmente su graduación.