Jack Jones se levantó con ganas de ver al mundo arder en plena Navidad.
Y es que el esquinero de los Raiders se llevó uno de los momentos del día al hacerla de Grinch en pleno duelo entre Las Vegas y Kansas City, tras interceptar al QB Patrick Mahomes y dejar otra escena tragicómica tras esa acción.
Al final del segundo cuarto, Mohomes se disponía a avanzar en primera y diez con un pase por el costado derecho, pero ahí se le apareció el esquinero Jack Jones no sólo para interceptarle, sino para dejar el balón en las diagonales.
Jones se burló de Mahomes al anotar, pero no paró ahí, pues además se acercó a una de las gradas del Arrohead Stadium, justo a la zona donde había un grupo de aficionados de Kansas, entre ellos varios niños.
Allí, Jones se dirigió justo donde estaba un pequeño ataviado con los colores de los Kansas City Chiefs, amagó con darle el ovoide de la intercepción, pero justo cuando el niño acercó las manos, el esquinero se llevó el ovoide de vuelta para sorpresa de él y quienes le rodeaban, mientras el resto de los Raiders festejaban con Jones.