El Mallorca disputará su cuarta final en la historia de la Copa del Rey de la mano de Javier Aguirre luego de vencer en la tanda de penales a la Real Sociedad. El entrenador mexicano jugará su segunda final en este certamen, pues la primera la consiguió dirigiendo al Osasuna en la temporada 2004-2005.

Después del partido en el Estadio Municipal de Anoeta, el técnico tricolor reconoció que sufrieron “como perros” en las semifinales; sin embargo, considera que al no ser favoritos la falta de presión les ayudó a conseguir el objetivo y que ni siquiera ensayaron los penales.

“Nosotros no teníamos ninguna presión. No sé si me creerán o no, pero no ensayamos penaltis. Lo anotamos en nuestro programa día a día y por alguna razón, porque llovió, porque había viento, porque ya se fue el otro... por lo que sea, no tiramos penaltis [...]. Esa falta de presión nos fue ayudando a ir creciendo en la competición y hoy llegamos con esa tranquilidad de saber que si te gana es normal”, sentenció en conferencia de prensa.

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¡La clave del éxito!

Además, Vasco Aguirre destacó el amor de los futbolistas por jugar este certamen, ya que considera que fue clave para asegurar el boleto y pelear por el título.

“En el vestuario había más jugadores con descensos que con títulos. Esa humildad, ese amor propio de ser profesional te lleva a comprometerte, te lleva a competir, te lleva a sentirte que puedes, que vale la pena el esfuerzo”, expresó.

¡Agradecido con la afición!

Por otro lado, el entrenador mexicano expresó que se siente orgulloso de entrar a la final de la Copa del Rey después de dos temporadas en el banquillo del Mallorca, pues aseguró que se siente agradecido por la confianza que le brindó la afición desde un principio.

“Llevamos dos años aquí y creo que la gente nos ha aceptado bien, nos ha apoyado siempre desde que empezamos, y es una manera de devolverles el cariño que nos da la afición. La gente en la calle siempre me deseaba suerte y ánimo, me daba fuerza”, sentenció.