¡Feyenoord tomó oxígeno en Champions League! Sin Santi Giménez, remontó ante Girona como visitante

Un autogol de Ladislav Krejci, a diez del final, dio el triunfo al conjunto neerlandés

Sin el mexicano Santi Giménez, desestimado por lesión, Feyenoord montó una espectacular voltereta para derrotar 3-2 a Girona y así lograr su primera victoria bajo el nuevo formato de la Champions League.

El delantero mexicano será baja para los próximos meses a causa de una lesión muscular.

¡GIRONA TOMÓ VENTAJA EN MOTIVILI!

En el minuto 6 Timon Wellenreuther protagonizó una parada providencial para repeler un fuerte disparo desde dentro del área de Viktor Tsygankov.

El cuarto saque de esquina local llegó cuando solo se habían disputado 19 minutos y propició el primer gol de la historia del club catalán en la Champions League. Siempre llevará la firma de David López, que recogió el rechace de la defensa a un cabezazo de Bojan Miovski para desatar la euforia entre la afición rojiblanca.

El 1-0 fue un premio merecido para el Girona, pero cuando lo tenía todo a favor apareció la mala suerte. Primero el Feyenoord empató con un autogol de Herrera al introducirse la pelota en su propia portería en una falta lateral sin aparente peligro y acto seguido perdió por lesión a Tsygankov, MVP en la primera media hora.

Fueron dos jarros de agua fría consecutivos que helaron al estadio y aún más al equipo, tocado. Cumplida la media hora David López cometió un grave error en la construcción de la jugada y regaló la pilota al Feyenoord, con las líneas adelantadas: Quinten Timber cortó y Paixao dejó a Milambo solo ante Paulo Gazzaniga. No perdonó para el 2-1.

¡FEYENOORD SACÓ EL TRIUNFO IN EXTREMIS!

Parecía que no llegaría nunca, pero el 2-2 acabó cayendo en el 73′: Arnaut Danjuma se internó en el área por la izquierda y asistió a Van de Beek para que restableciera el equilibrio y diera alas al Girona. Acto seguido Míchel recurrió a Yáser Asprilla y a Cristhian Stuani para dejar claro que Montilivi ansiaba los tres puntos.

Pero no era la noche del conjunto catalán, que en el minuto 79 recibió el enésimo y ya definitivo golpe. Ladislav Krejci firmó el 2-3 en propia al intentar desviar un centro de Dávid Hancko. No dejó de perseguir el gol, por vía de Stuani e incluso de Gazzaniga, pero no lo encontró.