Uno de los protagonistas de la victoria más improbable en la historia del Super Bowl ha tenido que subastar su anillo de la NFL, al encontrarse en bancarrota. Nos referimos al ex receptor Plaxico Burress, quien fue campeón con los New York Giants al vencer a los New England Patriots de Tom Brady, que llegaban invictos a aquel partido por el título en febrero del 2008.
Burress ganó alrededor de 30 millones de dólares durante su carrera en la NFL, pero tiene un historial de problemas financieros, demandas civiles e impago de impuestos, que lo han llevado a tener que subastar su reliquia del Super Bowl para intentar salir adelante.
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Plaxico Burress subasta su anillo del Super Bowl en precio récord
Plaxico Burress logró el touchdown con el que los Giants sorprendieron al mundo, quitándole el invicto a los Patriots, que llegaron al Super Bowl XLII con la posibilidad de coronar una Temporada 2007 perfecta, pero, cuando quedaban 35 segundos, el receptor abierto anotó a pase de Eli Manning para el 17-14 final.
“Recuerdo que Eli me dijo que, si veía cobertura sencilla sobre de mí, me lanzaría la pelota a la zona de la esquina. Cuando me alineé, vi que solamente había un esquinero frente a mí, supe que era mi turno. Hice una pequeña finta, volteo para buscar el ovoide y me llegó justo al pecho, no podía creerlo, era campeón de la NFL”, mencionó Burress en una entrevista con el sitio oficial de los Giants en 2017.
Ahora, ese anillo de Super Bowl que ganó en febrero del 2008 fue vendido en poco más de 280 mil dólares, de acuerdo con Heritage Auctions, quienes se encargaron de llevar la subasta.
Se cree que el precio es el segundo más alto por un anillo de Super Bowl jamás vendido del que se tiene registros, porque el del Super Bowl V que ganó el entrenador en jefe de los Baltimore Colts, Don McCafferty, se vendió por 300,000 dólares en 2022.
¿Quién es Plaxico Burress?
Llegado a la NFL en el Draft del 2000 como la octava selección global de los Pittsburgh Steelers, este receptor abierto pasó sus primeras cinco campañas con ellos, para después mudarse con los New York Giants por cuatro años, con quienes ganó el mencionado Super Bowl ante los invictos Pats de Tom Brady.
Tras su paso con los Giants, fue liberado en 2009 y suspendido dos años por la NFL por violar el código de conducta, luego de flagelarse con un arma de fuego de forma accidental. Volvió en 2011 con los New York Jets y un año más tarde regresó a Pittsburgh para acabar su carrera.